Raúl regresa a casa después de un largo y cansado día de trabajo, enciende su PC para checar su cuenta de correo, de inmediato nota en su bandeja de entrada un correo de una dirección que a él no le parece conocida, algo que llama mucho su atención, pues es raro que reciba correos de direcciones desconocidas, leyó “Asunto: ME RECUERDAS?... PORQUE YO A TI SÍ, TODO EL TIEMPO.” Sin pensarlo, se dispone a abrirlo y da “clic”. Al abrirlo mayor es su sorpresa que al recibirlo, al pasar de las líneas, nota un gesto familiar, aquella sonrisa, esos ojos, y en automático sin pensarlo pronuncia el nombre que en silencio ha estado pronunciando desde su infancia “Fernando”, y cierto es, no hay lugar a dudas el correo esta firmado por Fernando, con quien ha compartido tanto. Sin meditarlo toma el teléfono.
Fernando desciende del autobús, recibe su maleta y se dirige a la sala de espera de la central de camiones, en la sala de espera toma un lugar, en el momento en que se sienta rompe en llanto, sabe que nada volverá a ser como antes, recuerda a su mujer, su ex mujer, gritando y deteniendo a la pequeña Gabriela, sabe que las ha perdido, sabe que no hay más que hacer, y de algún modo sabe que esa vida nunca había sido para él. No puede contener el llanto, se ha mentido toda su vida, y como si las demás personas lo supieran el siente las miradas de todos los presentes en la sala, aun así el llanto no lo puede controlar. Observa el reloj, el autobús ha llegado minutos antes de lo previsto.
Raúl acelera, quiere llegar antes para recibir a Fernando en cuanto descienda del autobús. Fernando sentado en el autobús observa fuera por la ventanilla. Raúl entra al estacionamiento de la central y lo recorre lentamente buscando un buen lugar para dejar estacionado el automóvil. El autobús en el que viaja Fernando hace su arribo a la central camionera. Fernando y Raúl esperan encontrarse pronto, saben que todo cambiará a partir de hoy. Fernando espera sentado ahogado en llanto. Raúl llega, lo busca pregunta a un guardia de seguridad y le informan que el autobús ya arribó hace algunos minutos, se mueve, busca a Fernando. Lo ve, lo ve de lejos, sabe que es él aun cuando han pasado más de trece años desde aquel momento en el que se separaron creyendo jamás volverse a ver.
Fernando recuerda el día en el que le dijo a Raúl que se iría a vivir a otro lado que tal vez jamás volverían a verse, recuerda las manos de Raúl sobre sus hombros y aquellas palabras que le dijo para tranquilizarlo:-“No sufras sólo recuerda que eres el hombre más importante en mi vida y siempre lo serás, siempre estaré para ti no importa cual lejos estemos el uno del otro, cierra los ojos y sabrás encontrarme, yo por mi parte haré lo mismo”. Raúl lo busca sabe que ha cambiado que ya no es el mismo niño de catorce años del cual se despidió desde la ventana de su casa con un aleteo de manos y lagrimas en los ojos. Reconoce a Fernando sentado inclinado pues aún sigue llorando, se acerca y pone sus manos en sus hombros y le dice -No sufras sólo recuerda que eres el hombre más importante en mi vida y siempre lo serás, siempre estaré para ti no importa cual lejos estemos el uno del otro, cierra los ojos y sabrás encontrarme, yo por mi parte haré lo mismo. -Y agregó- Ya ves que sí nos volvimos a ver- en ese momento ambos se abrazaron y lloraron juntos Fernando de coraje y felicidad, Raúl de incredulidad y felicidad. Saben que este encuentro cambiará el rumbo de sus vidas, aun no saben como sólo saben que cambiará.
De camino a casa Raúl le pide a Fernando que le cuente bien como fueron las cosas, ¿qué era lo que le había hecho regresar, lo que le había hecho buscarlo y qué era de lo que estaba huyendo? Fernando responde:- Huyo de mi mismo, de mi soledad. Sabes, toda mi vida siempre he soñado lo mismo pase lo que pase cada mañana me despierto pronunciando tu nombre Raúl, Raúl, no hay mañana que no lo pronuncie, últimamente fue más y más fuerte hasta que una mañana Erica, mi esposa, perdón ex esposa me escuchó, pregunto que quién eras, yo le dije que eras mi mejor amigo y preguntó que porque nunca le había contado de ti, que porque todas las mañanas te mencionaba no supe que decirle. En el fondo quería decirle que eras, eres y serás el “hombre más importante en mi vida”, como tú me lo habías dicho el día en que te dije que mi mamá me llevaría a vivir con mis abuelos en Guadalajara porqué no soportaba la soledad después de la muerte de mi padre. En el fondo de mi corazón yo sabía que te volvería a ver que volveríamos a estar juntos, y ve, después de que Erica me corrió de la casa y dejándome claro que jamás volvería a ver a mi hija Gabriela decidí buscarte, encontré tu correo en una red social y te escribí no sabía a quien acudir, sólo sabía que quería volver a estar contigo y sentí que eras el único con quien podía estar por eso te escribí, por eso te busqué-.
Dos niños de trece años están jugando videojuegos en la habitación de uno de ellos, de pronto, uno hace un pequeña trampa para distraer al otro y en un gesto de juego ambos empiezan a jugar a las llamadas “luchitas”, comienzan a girar en la cama hasta que uno queda encima del otro, pero demasiado cerca y como por error se deja caer y sus labios quedan junto a los del otro niño por breves segundos éste último le corresponde para después empujarlo y bajar corriendo gritando -ya es tarde mi mamá se molestará, Adiós señora- Se escucha una voz femenina que le corresponde.
Fernando acomoda una a una las cosas que se lleva a su viaje, viaje que quizá no tenga retorno. Raúl desempaca la ropa y las cosas de Fernando acomoda una a una sus prendas y las pone en su armario intercalándolas una a una con las suyas. Fernando escribe una carta de renuncia la lee cuidadosamente antes de entregarla en el despacho de su jefe, momentos después la entrega. Raúl está escribiendo una carta de recomendación para Fernando quien lleva una solicitud de empleo a un complejo de oficinas. Fernando tiene en sus manos un acta de divorcio, la lee cuidadosamente y firma sin decir una sola palabra. Raúl le entrega a Fernando un juego de llaves de la casa, y le entrega también un reloj similar casi idéntico al que ha usado desde la llegada de Fernando. Fernando le da un beso a Gabriela su hijita, y le dice a Erica que le disculpe y que a pesar de ser dolorosa está decisión es lo mejor para los dos y la despide con un beso en la frente, Erica rompe en llanto. Fernando abre la puerta del departamento, abraza a Raúl quien le está esperando.
Raúl y Fernando bajan las maletas de Fernando del automóvil de Raúl, obligados por un impulso incontrolable ambos se abrazan, caminan hacia al ascensor oprimen el botón del último piso que es el piso en el que se encuentra el departamento de Raúl. Raúl abre la puerta y le dice a Fernando –Bien a partir de hoy está es tu casa, sólo hay un pequeño detalle. Sólo tiene una habitación así que… tendrás que compartirla conmigo.- los dos se ven a los ojos y sonríen. Raúl le muestra el departamento a Fernando, después le invita una copa de vino, le sirve la cena. Por último comienzan a desempacar y a instalar a Fernando en su nuevo hogar.
Fernando despierta en el sillón de su casa, sobresaltado, sabe que es apenas el principio, que esta discusión con Erica no lo llevará a nada bueno se acerca a su recamara se anuncia en la puerta Erica accede a que pase el se sienta en la cama y le dice:- Estoy seguro que no quieres saber más de mi, pero recuerda que tenemos una hija y pase lo que pase entre tu y yo, yo seguiré viendo por ella. Pero creo que lo mejor es que nos separemos y lo hagamos de la manera más civilizada pues será mejor evitarnos más dolor, me iré, no preguntes, la verdad no lo sé sólo sé que mejor será que nos separemos, jamás olvidaré todo el amor que me diste y que con ese amor me diste el mayor regalo Gabriela, sólo una vez que me instale permíteme verla permíteme visitarla, estar con ella, y recuerda que siempre las llevaré en mi corazón.-Saca una maleta del armario y poco a poco va acomodando la ropa y sus pertenencias, ante el llanto de Érica, al final coloca una foto de los tres juntos, como la familia que fueron.
Fernando está afuera de la casa donde vivía con Erica llama a la puerta, en el momento en el que le abren ve a Gabriela la abraza le dice que la ama y le presenta a Raúl a Erica, Erica no da crédito, Fernando y Raúl se toman de las manos Fernando cargando entre sus brazos a la pequeña Gabriela.
Esta historia está inspirada en la canción que hiciera famosa Yuri, que lleva el mismo nombre. (sería un buen argumento para un videoclip de la rola).
